Sábato


Hace unos cuántos años que leí El túnel y me pareció maravilloso. Luego seguí con Sobre héroes y tumbas. Libro que hizo temblar mis cimientos. Hará unas semanas que terminé de leer Abaddon el exterminador, que terminó por derrumbar muchos pilares de mi mente. Tuve que leer La Resistencia, para sacarme un poco el rico sabor amargo de las penurias de la humanidad. Aunque en realidad, en La Resistencia, tampoco uno encuentra el bello licor de la esperanza.
Sin lugar a dudas, un escritor deslumbrante. Como nadie, escribe sobre nuestras miserias, sobre este ser humano que se desangra mutuamente. En cada rincón se vislumbra el apocalipsis. No seamos bíblicos, pero el apocalipsis está entre nosotros, desde hace mucho tiempo vivimos en un infierno.
En La resistencia, nos deja ese mensaje de esperanza y de que estamos en el momento histórico para cambiar las cosas y no derrumbarnos en el abismo.
Aún las ideas de sus libros, (especialmente de los dos últimos que leí), están muy frescas en mi mente. Debo dejarlas reposar un momento. Quizás por varios días, hasta que pueda hilvanar una idea y comentarles que es lo que me dejaron sus textos.
Ellos hablan mucho como yo, casi que diría que dicen lo que no sé decir. Pero no hablan a nivel racional, sino en el plano existencial. Es el espíritu el que habla. El alma que conoce nuestro porvenir y que en nuestros sueños nos advierte, nos muestra a veces con tremendas pesadillas, nuestro destino, si es que no cambiamos nuestro espíritu.

No se dejen llevar por los que dicen que solo es un viejo amargado.
Sábato, afronta la realidad. Aunque nos duela. Aunque no nos guste que nos diga en al cara que estamos haciendo las cosas mal y que somos cobardes si no nos enfrentamos al cambio.

1 comentario:

juanfurlo dijo...

No se porqué pero Ernesto dejó de ocupar lugar con sus ideas, a pesar de la brillantes del tunel, creo que me volví un negador crónico o estoy profundamente enamorado de Julio. No sé.

Estoy leyendo los Premios.